El fenómeno de las redes sociales es muy reciente. Son menos de diez años de actividad en estas plataformas los que nos contemplan, y en ellos hemos desarrollado una serie de hábitos y dinámicas que son en esencia las mismas que tenemos en el mundo real. Sin embargo, circulan no pocas concepciones equivocadas sobre la actividad en redes como Twitter o Facebook y, en cambio, otras realidades importantes se ignoran de forma sistemática. Este artículo desvela cinco mitos y otras tantas verdades que debemos tener en cuenta a la hora de acceder a una red social.
Cinco mitos sobre las redes sociales
1. El ciberacoso campa a sus anchas.
Es probable que haya pocos sitios más seguros que una red social de primer nivel para defenderse de acosadores de toda índole. Todo lo que se dice en ellas queda registrado y cualquier expresión ofensiva o intimidatoria puede ser denunciada con inmediatez a los responsables mediante procedimientos al alcance del usuario. En la inmensa mayoría de los casos, estos actúan de forma tajante con acosadores, amenazadores o calumniadores. Además, agentes de los diferentes cuerpos policiales están destinados a las redes para investigar comportamientos delictivos.
2. Dentro, la libertad de expresión es absoluta.
Cualquier expresión ofensiva o intimidatoria puede ser denunciada con inmediatez
Del mismo modo que los responsables de una red social están obligados por ley a vigilar las expresiones ofensivas y amenazantes que otros puedan tener hacia nosotros, nuestras opiniones y acciones también están sujetas a su supervisión. En las redes sociales no podemos decir lo que queramos; si lo hacemos, es bajo nuestra responsabilidad. Para las redes rige la misma ley que para fuera de ellas: libertad de expresión dentro de los límites del respeto a la integridad física y moral de los demás.