BIBLIOTECA PÚBLICA MUNICIPAL: LOS HITITAS

venres, 1 de marzo de 2019

LOS HITITAS

LOS HITITAS

Autor: Carter Scott

Edimat Libros, S.A

Género: Literatura en Castellano - Historia

Escribir sobre los Hititas supone un juego fascinante, en el que los enigmas se convierten en estímulos similares a los que pueden encontrarse en las selvas vírgenes, en las simas jamás exploradas o en esos panteones donde nadie se ha atrevido a penetrar. Porque se trata de una civilización nacida en el siglo XX a.C., que alcanzó su esplendor cuando Egipto vivía su mejor época. Los dos imperios rivalizaron con las armas, el comercio y el afán de conquista, hasta que se enfrentaron en una de las batallas más famosas de la antigüedad. ¿Quién obtuvo la victoria?

Los hititas ocuparon las tierras de Anatolia (parte de la Turquía actual), para dar forma a una sociedad asombrosa, en la que todo se hallaba previsto. Por ejemplo, cuando un crimen quedaba sin resolver, eran castigados los dueños de la casa o todo el pueblo.

Guerreros desde que nacían, supieron utilizar el hierro antes que los egipcios, y construyeron unos carros de combate invencibles. Por eso durante más de cuatro siglos fueron los "amos" de Asia Menor.

Los reyes Hititas se hacían llamar "Yo, el sol" porque trataban a los dioses como a sus iguales. Sin embargo, en la vida jamás se consideraron unas divinidades, ya que esta condición sobrenatural la adquirían al morir.

Los magos Hititas sabían leer el vuelo de los pájaros y las entrañas de los animales, lo que les permitía adivinar el resultado de una guerra o el futuro de una relación amorosa. También curaban todos los males existentes, hasta que aparecieron los temibles "hombres del mar..." ¡Surgieron de ese mar que tanto odiaban los Hititas! ¿Cómo era posible que un país tan poderoso, que fabricaba el armamento más mortífero de la época, hubiera dejado sin protección las costas? Por éstas llegaría su destrucción, para quedar enterrados bajo toneladas de tierra y rocas. Hasta que en el siglo XX, hace unos ochenta años, fueron "desenterrados" ¡como un tesoro humano y cultural fabuloso, que hemos sabido encerrar en esta obra que tiene usted en sus manos!