A muchos de nosotros, sobre todo cuando descubrimos que nos han engañado o gestionado nefastamente cualquier situación, nos gustaría ser como Sherlock Holmes, Eddie Morra o cualquiera de los personajes de ficción que podrían estar en el Top5 en cuanto a perspicacia. Personajes que probablemente obtendrían un CI mucho más elevado que el nuestro en un test de inteligencia. ¿O no? ¿Hasta qué punto una batería de preguntas sirve realmente para medir nuestras destrezas intelectuales en particular y nuestra inteligencia en general?
Investigadores de la Universidad Western Ontario, de Canadá, después de realizar el mayor estudio online internacional destinado a medir la inteligencia, con 100.000 participantes, han concluido que es un error tratar de usar un único test estándar para medir el llamado cociente intelectual. Las tareas, que integraban 12 pruebas, podían ser completadas en internet en media hora.
Adam Hampshire, que lideraba el estudio, y sus colegas usaron 12 tests cognitivos que evaluaban la memoria, el razonamiento, la atención y la capacidad de planificación, entre otros parámetros. Y llegaron a la conclusión de que no existía un único elemento, ni tampoco un único circuito neuronal, que explicara todas las variaciones individuales. Los resultados de la investigación, publicados en la revista Neuron, sugieren que las pruebas de CI que se han utilizado durante décadas tienen "fallas fundamentales" porque no toman en cuenta "la compleja naturaleza del intelecto humano con todos sus distintos componentes".
Además, los científicos comprobaron que la edad, el género y la costumbre de jugar con videojuegos influía en las respuestas. Tal y como señala Hampshire:
Las personas aficionadas a los videojuegos obtenían mejores resultados en razonamiento y memoria a corto plazo.
Los datos también parecen sugerir que los fumadores tienen peor memoria a corto plazo y obtienen menos puntuación en habilidades verbales. Y que la memoria de las personas que sufren ansiedad también se ve claramente afectada. Para confirmar los resultados, los científicos sometieron a 16 participantes a escáneres de imágenes de resonancia magnética funcional (fMRI).
El profesor Roger Highfield, del Museo de Ciencia de Londres y otro de los autores del estudio, también señala:
Los resultados desmienten de una vez por todas la idea de que una sola medida de inteligencia, como el CI, es suficiente para capturar todas las diferencias en la capacidad cognitiva que vemos entre las personas. En lugar de eso, varios circuitos diferentes contribuyen a la inteligencia, cada uno con su propia capacidad única. Una persona puede ser buena en una de estas áreas, pero mala en las otras dos. ( ) Todos conocemos a personas con poca capacidad de razonamiento pero con una memoria brillante o habilidades lingüísticas fantásticas pero no son muy buenas para razonar, etc.
Después de todo, quizá no es tan descabellado que podamos aspirar a ser como algunos de los 5 personajes más inteligentes de la literatura, aunque sea un poco, y en alguna área particular.
Por Sergio Parra